Fundación Mapfre propone un ambicioso otoño con Picasso, Matisse o Chagal
La Fundación Mapfre ha programado para el próximo otoño en sus sedes de Madrid y Barcelona, dos exposiciones que recopilará obras de Picasso, Sorolla o Monet, así como el vanguardismo y rupturismo de los rusos Chagal o Malevich.
En concreto, la Fundación Mapfre abrirá el próximo 10 de octubre la exposición “Redescubriendo el Mediterráneo”, una muestra que, según ha dicho el director del área de cultura de la fundación, Pablo Jiménez Burillo, es un “cierto resumen” del trabajo realizado en los últimos años, ya que han encontrado en el Mediterráneo un nexo de unión entre artistas, a priori, dispares.
Así, su sede del madrileño Paseo de Recoletos, hasta el 13 de enero de 2019, acogerá esta exposición de producción propia que contará con 140 obras, 10 de ellas de Picasso, entre las que destaca una “inédita” marina.
Entre las obras que se podrán ver se encuentran “Los Pichones” (1957) de Picasso, “La Méditerranée” (1888) de Monet, así como otras de Matisse, quien junto al pintor malagueño protagonizará la parte final de esta exposición que “plantea que una parte importante de la renovación artística se hizo en el sur de Europa”, así como resalta “esa modernidad que necesita el mundo clásico para seguir avanzando”, según Jiménez Burillo.
Por su parte, la sede barcelonesa de la Fundación Mapfre se convertirá en la casa de acogida de “Picasso-Picabia” (11 de octubre – 13 de enero de 2019), otra propuesta que pondrá a “dialogar” a estos pintores para demostrar a los visitantes cómo a lo largo de sus carreras hubo “puntos de encuentro”.
La muestra planteará, a través de 150 piezas y documentos, un recorrido por un periodo esencial de la historia del arte, desde 1910, hasta 1925.
Pero, según ha enfatizado Jiménez Burillo, junto a “Redescubriendo el Mediterráneo”, la otra gran exposición de su programación otoñal será la dedicada a las vanguardias rusas, una convocatoria que “no se podrá volver a hacer” ya que las obras que llegarán a Madrid, debido a su relevancia, “no volverán a salir o reunirse”.
Con estas palabras ha querido destacar la importancia de esta muestra que arrancará en febrero (fechas concretas aún sin definir) con 80/90 piezas, y confrontará a Chagal y Malevich, “dos mundos” que también conversarán con otras visiones, como la de Kandinsky o Popova.
Se trata también de una exposición de producción propia y que solo estará en Madrid dada la “complejidad” de los préstamos, llegados no solo de los principales museos rusos, sino también del Pompidou parisino.
“Es uno de los proyectos más ambiciosos”, ha afirmado Jiménez Burillo sobre esta cita que contará con óleos tan importantes como el “Cuadrado”, “Círculo” y “Cruz de Malevich, así como el autorretrato de Chagal.