La Fundación Mutua Madrileña presenta estudio sobre acoso escolar

Foto: Fundación Mutua
La Fundación Mutua Madrileña, presidida por Ignacio Garralda, ha presentado su más reciente estudio sobre acoso escolar, un problema que continúa siendo una realidad extendida en España. Se basa en los resultados de las encuestas realizadas a alumnos y profesores de centros escolares que han participado en los programas de prevención del bullying, realizados por la organización y la Fundación ANAR en 2017.
El informe revela que la tercera parte de los alumnos afirman que en su clase existen situaciones de acoso escolar. No obstante, en la misma encuesta llevada a cabo en 2016 el 50% de los jóvenes consultados manifestaba la existencia de casos.
Las conclusiones de este informe se han extraído del análisis de una muestra de más de 2.600 encuestas realizadas a alumnos de 6º de primaria, 1º de la ESO y 2º de la ESO pertenecientes a centros escolares públicos y concertados del centro peninsular, así como a un centenar de profesores de los mismos colegios e institutos.
La mayoría de los docentes encuestados coincidieron al señalar que los complejos, los problemas de inseguridad, la baja autoestima o el miedo al rechazo son las características principales del acosador, seguidas de la agresividad y el sentimiento de superioridad. Además, más de la mitad de los profesores entrevistados destacaron la visión que tienen los jóvenes de la violencia como algo normalizado en la vida cotidiana, como otro de los aspectos decisivos para que se produzca el acoso escolar.
Aumento en el número de casos de acoso en grupo
La fundación que preside Ignacio Garralda explicó que las encuestas entre los alumnos también indican un aumento en el número de casos en los que el acoso se produce en grupo (el 66,7% en 2017 frente al 55% del año anterior). En cuanto a su percepción, aumentan los alumnos que ven el acoso escolar como un tipo de maltrato (97,7%) y disminuye el número de los que lo consideran una broma o algo normal que ocurre entre compañeros (1,6% en 2017 frente a 5,4% en 206).
El estudio también indica que, siempre según los propios estudiantes, las niñas se ven más afectadas por el bullying que los niños. Frente a estas cifras, crece el número de chicos que ven en la unión entre compañeros la medida más efectiva para frenar el acoso escolar cuando ya ha comenzado a producirse (80,3% en 2017 frente a 65,7% en 2016) en comparación con otras alternativas como pedirle ayuda directamente al profesor, que disminuye del 77% al 73%.
La mayoría de alumnos, un 62%, piensa que los acosadores actúan por creerse mejores que sus compañeros y, en segundo lugar, que solo lo hacen para divertirse. Destacan como principales causas del acoso la forma de ser de las víctimas y su aspecto físico, en más del 50% de los casos. Un 20% afirma que el motivo es por pertenecer a otra cultura o raza.
Finalmente, según indicó la organización que preside Ignacio Garralda, los insultos y las agresiones físicas son las formas más habituales de acoso, alrededor del 85% en ambos casos, seguidas de las diferentes formas de presión psicológica (aislamiento, exclusión y difusión de rumores) que sufre una de cada tres víctimas (32,2%).