El 72% de los jóvenes con discapacidad creen que su situación les perjudica al buscar empleo, según Fundación Adecco
El informe ‘Millenials con Discapacidad, motor de futuro‘ de la Fundación Adecco y JYSK, que recoge una encuesta realizada a 500 personas de entre 18 y 35 años con discapacidad, revela que el 72% de jóvenes con discapacidad considera que su situación le perjudicará a la hora de encontrar empleo.
El estudio estima que en España hay 9.477 jóvenes (hasta 25 años) con discapacidad inscritos como demandantes de empleo. Se trata, sobre todo, de hombres (64%) que en un 41% de los casos tienen algún tipo de discapacidad física y de los cuales el 61,4% reside en Andalucía, Cataluña, Comunidad Valenciana y Madrid. Del total de jóvenes discapacitados, el 35% es desempleado de larga duración, es decir, lleva más de un año buscando empleo sin éxito.
Según el análisis, a pesar de esto, un 90% de ellos cree, en realidad, que su discapacidad le refuerza en valores como el esfuerzo, la constancia o la tolerancia a la frustración.
Francisco Mesonero, director general de la Fundación Adecco, aseguró que “la discapacidad conlleva la convivencia con el sacrificio y no es extraño que los jóvenes se vean reforzados en dichas competencias”.
El informe también muestra que 6 de cada 10 cree que tardará más de un año en encontrar una ocupación frente a los jóvenes sin discapacidad de los cuales sólo el 2% piensa que se demorará más de 12 meses.
Se evidencia que la carencia formativa es una de las principales causas de desempleo pues el porcentaje de menores de 25 años con discapacidad en desempleo que no ha superado la ESO es del 64,3%. En este sentido, sólo el 8,2% de los jóvenes con discapacidad desempleados cuentan con estudios universitarios, casi la mitad que el resto de los jóvenes (17,2%).
Pablo Pineda, primer diplomado europeo con síndrome de Down y embajador de la Fundación Adecco afirma que es necesario un modelo de educación inclusiva que reduzca la brecha formativa.
Pineda indicó que “desde mi punto de vista, el valor de la educación inclusiva es precisamente buscar la equidad, analizar las necesidades de cada persona y ofrecerle alternativas que respondan a las mismas. De este modo, las personas con discapacidad podríamos alcanzar la plenitud educativa haciendo una FP, con un certificado de profesionalidad o mediante otras fórmulas intermedias que no nos conduzcan a tocar nuestro techo formativo a los 18 años”.
Entre los jóvenes con discapacidad que encuentran empleo, el informe de mercado de Trabajo de las personas con discapacidad, del SEPE, revela que el 20,2% encuentra trabajo como peón de industria manufacturera, seguidos de un 19,6% que lo hace como personal de limpieza en oficinas y hoteles y un 12,6% que lo hace como camarero.
Respecto a este panorama, Pineda explicó que “para mí el reto sería que, en unos años, podamos ver a las personas con discapacidad trabajando en bancos, bufetes de abogados y liderando equipos de trabajo”.
Y agregó que “es necesario un salto cualitativo que elimine la sobre protección de las familias y que las Administraciones Públicas y empresas abanderen un cambio de mentalidad que apueste por procesos de selección ciegos, donde lo único que importe sean las competencias de las personas”.