Stephen Hawking y Viatcheslav Mukhanov, premiados por la Fundación BBVA
Los físicos Stephen Hawking y Viatcheslav Mukhanov han sido los ganadores del Premio Fundación BBVA Fronteras del Conocimiento en la categoría de Ciencias Básicas por haber descubierto, ambos trabajando de forma independiente, que las galaxias se formaron a partir de perturbaciones cuánticas en el principio del Universo.
Los premios, que están dotados en cada categoría con 400.000 euros (en este caso, los dos investigadores se repartirán la cuantía), han sido dados a conocer en la sede de la Fundación BBVA en Madrid y distinguen el descubrimiento “más importante demostrado experimentalmente” que une cosmología y física cuántica, ha señalado Ignacio Cirac, miembro del jurado internacional y director de la División Teórica del Instituto Max Planck de Óptica Cuántica (Alemania).
A principios de los años 80, Hawking y Mukhanov propusieron que en el universo recién nacido, fracciones de segundo después de iniciarse la expansión, tuvieron que existir fluctuaciones cuánticas que actuaron como semillas de las galaxias. La materia se agrupa en el universo formando galaxias, cúmulos de galaxias y supercúmulos de galaxias, y esas grandes estructuras de materia llevan creciendo poco más de 13.000 millones de años, es decir, desde que el universo empezó a expandirse en el Big Bang.
Tres décadas después, en el 2013, los datos obtenidos por el telescopio espacial Planck de la Agencia Espacial Europea confirmaron la teoría enunciada por estos dos investigadores. Planck ha medido exactamente, “con una precisión del 99,999999….%”, lo que habíamos predicho”, dice Mukhanov.
Planck indicó no solo el origen cuántico de las estructuras del universo, sino también la enorme precisión con que calcularon la evolución y consecuencias de las fluctuaciones cuánticas (“grumos” de energía que aparecieron después del Big Bang).
Y es que, además de dar una explicación de por qué el universo es desigual, Hawking y Mukhanov cuantificaron las diferencias de temperatura de esas fluctuaciones y predijeron que sería posible detectarlas en la radiación de fondo del universo miles de millones de años después.
Mukhanov, actualmente catedrático en la Universidad de Ludwig-Maximilians de Múnich, ha señalado tras conocer el premio que “ni en sus mejores sueños” imaginó que sus predicciones llegarían a ser demostradas experimentalmente.